Una de las más grandes cadenas de comida rápida ha visto en un país como la India un gran número de potenciales consumidores desde hace tiempo, sin embargo el hecho de que los hinduistas consideren a la vaca como animal sagrado y que la parte musulmana no consuma carne es algo que por años ha frenado su crecimiento, pero al parecer las cosas están a punto de cambiar.
Este mes, McDonalds anunció la próxima inauguración de su primer restaurante en este país cuyo menú en lugar de ser veggie en un 50% como en el resto de sus tiendas, estará libre de carne en su totalidad, explicó su portavoz local, Rajesh Kumar.
Un ejemplo de estos platos es el McCurry Pan, compuesto de vegetales al curry como maíz, brócoli, hongos y pimiento rojo cubierto de salsa. Otras opciones son las hamburguesas de pollo preparadas al estilo culinario de este país.
McDonalds a la fecha ya cuenta con restaurantes en la India (271 para ser precisos) pero este será el primero en su tipo, el local estará ubicado en el nor-poniente del país, en Kashmir, cerca del templo Vaishno Devi con lo cual se esperan visitas no sólo de locales sino de turistas también.
La marca que desde hace tiempo ha apostado por «comidas más sanas» incluídas ensaladas, hará un salto más alejándose de su concepto original, pero el hecho de que no contenga carne su nuevo menú no necesariamente implica que sea más saludable, no olvidemos la eterna controversia de la adición de substancias a su comida (desde conservadores hasta antivomitivos), ni los altos niveles de grasa y azúcar que le han valido demandas en su país de origen, Estados Unidos
y en muchas otras partes del mundo. Simplemente en el 2001, después de varias demandas en Seattle, la marca admitió que sus papas fritas contenían extracto de res y lácteos cuando en un inicio declaró que no contenían ningún derivado animal.
Pero sí resulta resaltable que aunque su motivación sea económica, el hecho de que una cadena acusada una y otra vez de promover prácticas crueles y peligrosas de las granjas a las que le compran la carne comience a contemplar otras opciones.
Creo que aún está lejos el día en que apoyar multinaciones como estas tenga sentido si buscamos dar la mano a los negocios locales, actuar contra la explotación laboral y de políticas ambientales justas y el consumo responsable, entre otros, pero hay que prestar atención también a esta tendencia que demuestra que los factores culturales son capaces de modificar el corportamiento de las corporaciones, tal como se ha visto en el boom de nuevos productos «amigables» con el ambiente, de políticas verdes o creación de fondos para su asociación de caridad.
Habrá que esperar para ver los resultados de esta nueva apuesta por
el vegetarianismo. ¿Qué tan lejos llegará el McVeggie?
Enlaces:
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